El secreto de los muertos que los vivos ignoran: Osho habla sobre la relajación
¿Saben relajarse las personas?
En los 2 años y medio que llevo haciendo masajes (mucho o muy poco dependiendo de cómo se le mire) he atendido a una gran cantidad de personas, de perfiles muy diversos, estratos socioeconómicos distintos, etc. Sin embargo hay algo bien transversal que me impresionó cuando comencé y que me continúa impresionando: La verdadera incapacidad de muchas personas de relajarse. Ellas, aún cuando racionalmente quieran recibir un masaje, relajarse, descansar su cuerpo y todo eso, física y corporalmente no pueden dejar de tensionar los músculos de su cuerpo, especialmente en lo que refiere a los brazos o las piernas. En mi experiencia, esto es todavia más cierto en las personas de mayor edad, aún cuando obviamente haya excepciones de todo tipo.
Aprender y practicar la relajación es algo que debiéramos hacer todos, por un tema de salud, emocional, energético, etc. La relajación en un comienzo puede parecernos difícil, pero como en todas las cosas, con la práctica podemos mejorar cada vez más. No hay límite para la relajación, uno siempre puede estar más y más relajado. Aquí la demostración !
Es por esto que en esta ocasión les dejo unas cuantas frases de Osho que a mí me han gustado mucho acerca de la relajación, las frases hablan por sí mismas así que sin más preámbulo aquí están.
La relajación como actitud de vida (el camino del tantra)
- “no vas a luchar contra la corriente; eso es insensato. No puedes hacerlo, la corriente de la naturaleza es demasiado grande y demasiado fuerte. La mejor manera es aprender de un cadáver. Los muertos saben algunos secretos que los vivos no saben. Los vivos, si no saben nadar, se ahogan. Resulta muy curioso. Una vez que han muerto, salen de nuevo a la superficie. Estando vivos, se hundieron; ya muertos consiguen flotar. Indudablemente la persona muerta sabe algo que no sabe la vida. ¿Qué ocurrió? ¿Por qué el río y el mar se comportan de manera diferente con una persona muerta? Esa persona se deja llevar completamente. Ni siquiera trata de nadar. No está haciendo nada. El mejor nadador simplemente flota. El mejor nadador deja que lo lleve la corriente como si fuera un cadáver. Donde sea que vaya el río, siempre conduce al mar. Todo río conduce al mar, todo río está destinado tarde o temprano a alcanzar el mar. Tú sólo vas flotando con el río. Esto es lo que yo llamo confianza: confianza en que la existencia, sea donde sea que te lleve, lo va a hacer hacia el buen camino, hacia el objetivo adecuado. Confía plenamente a donde sea que te lleve, porque será a tu hogar”.
La relajación en la vida cotidiana
- “Ciertamente la sociedad te prepara para la actividad, para la ambición, para la prisa, para la eficiencia. Condena todo tipo de descanso llamándolo holgazanería. Condena a la gente que no está disparatadamente activa; porque la sociedad entera está disparatadamente activa, intentando llegar a algún sitio. Nadie sabe a dónde, pero todo el mundo está en ello: “¡Ve más de prisa!”“.
- “No te digo que te relajes todo el día. Haz tu trabajo, pero busca un poco de relajación. Quedarás sorprendido al constatar que si puedes relajarte durante una hora o dos de las veinticuatro. Tu comportamiento exterior cambiará; estarás más tranquilo, más calmado. Cambiará la calidad de tu trabajo: será más artístico y más agraciado. La relajación tiene poderes milagrosos.”
¿Relajación igual a la flojera?
- “No es holgazanería. El hombre perezoso puede parecer, desde el exterior, como si no estuviera haciendo nada, pero su mente va tan rápido como puede; mientras que en el hombre relajado lo está su cuerpo, lo está su mente, lo está su corazón.”
- “Empieza primero mientras estás sentado, descansando, y luego mientras estás haciendo cosas. Estás limpiando el suelo, trabajando en la cocina o en la oficina; sigue relajado. La acción no debe suponer una interrupción del estado de relajación. Así se produce una gran belleza, una belleza muy grande en tu actividad. Ésta tendrá el sabor de la m.editación”
Tu tensión, tu preocupación es la causa misma del malestar:
- La gente no deja de hacer esfuerzos innecesarios. Muchas veces los esfuerzos son precisamente la barrera; sus esfuerzos son los problemas que ellos mismos están creando.
- Observa bien… Hay casos en los que si empujas, fallarás. No trates de enfrentarte al río, no vayas contracorriente. El río fluye hacia el mar por sí mismo; hazte parte de él, parte del viaje. Te llevará hasta donde hay que llegar. Si te relajas, lo sabrás; si no lo haces, no lo sabrás.
¿Haz relajado alguna vez todos los músculos de tu cuerpo? De eso se trata Savasana, según algunos maestros, la postura más difícil de dominar del Yoga.
No es algo intelectual que haya que comprender, es algo que hay que experimentarlo, que sentirlo… te invito a intentar experimentarlo en cada momento que te sea posible. Ahora mismo en cómo estas sentado o acostado leyendo esto, ¿estás tensando algún músculo innecesariamente? ¿cómo está siendo tu respiración en este momento?. Intenta ser consciente cada vez que puedas en tu vida cotidiana, probablemente querrás incluir bastantes cambios a los hábitos corporales que hemos aprendido en el día a día.
Recuerda que tensión significa gasto de energía permanente, físico y mental. ¡No te desgastes en vano!